Oriol Batalla
Los mercados están en una fase de inestabilidad, con fluctuaciones que traen a la memoria lo sucedido en 2018, cuando la primera ronda de aranceles de Trump sacudió a los inversionistas. En aquel entonces, el impacto inicial fue de caídas abruptas, pero con el tiempo el mercado no solo se recuperó, sino que tomó impulso. Hoy, con una nueva serie de medidas proteccionistas en marcha, la gran incógnita es si veremos una reacción similar o si el contexto actual marcará un rumbo diferente.
Si algo nos enseña la historia es que los mercados no siguen líneas rectas, pero sí dejan patrones reconocibles. En medio de la volatilidad, las dudas pueden dominar el corto plazo, pero también se abren oportunidades para quienes piensan con visión estratégica. La clave sigue siendo la misma: paciencia, análisis y una mirada puesta más allá de las turbulencias del momento.
Los aranceles de Trump: ayer y hoy
El gráfico que hemos analizado muestra la evolución del S&P 500 en dos periodos distintos:
- Primera imposición de aranceles (2018): El mercado reaccionó con caídas, pero la tendencia se revirtió y el índice terminó el año en positivo.
- Nueva ronda de aranceles (2024-2025): Hasta ahora, la caída ha sido más pronunciada y la recuperación no ha llegado.
La gran diferencia entre ambos momentos es el contexto económico global. En 2018, las condiciones eran más favorables:
- La economía estadounidense estaba en crecimiento.
- La Reserva Federal aún tenía margen para ajustar tasas de interés.
- Había confianza en la política económica de Trump, con incentivos fiscales que impulsaban a las empresas.
Hoy, el panorama es más incierto:
- Inflación y tasas de interés elevadas, lo que dificulta la expansión económica.
- Mayor riesgo geopolítico con conflictos internacionales que afectan el comercio global.
- Desaceleración del crecimiento, lo que podría limitar la capacidad de las empresas para absorber los costos de los aranceles.
¿Cómo invertir en este escenario? Sectores ganadores y perdedores
Sectores a evitar (afectados por los aranceles)
Automotriz – Empresas como General Motors (GM) y Ford (F) dependen de insumos importados, lo que encarece su producción.
Industriales – Empresas como Caterpillar (CAT) sufren por el aumento en los costos del acero y el aluminio.
Bienes de consumo discrecional – Marcas como Apple (AAPL) y Nike (NKE) pueden ver una disminución en la demanda debido a la subida de precios.
Banca tradicional – La incertidumbre y la posible desaceleración pueden reducir el crédito y afectar bancos como JPMorgan Chase (JPM) o Citigroup (C).
Sectores defensivos y con oportunidad de crecimiento
Salud y farmacéuticas (20-25%)
- Empresas resistentes a crisis económicas.
- ETFs recomendados: XLV (Health Care Select), VHT (Vanguard Health Care).
Energía y materias primas (15-20%)
- Beneficiados por restricciones comerciales.
- ETFs recomendados: XLE (Energy Select), LIT (Global X Lithium).
Tecnología defensiva (15-20%)
- Software y cloud computing no dependen tanto de insumos físicos.
- ETFs recomendados: XLK (Tech Select), SKYY (Cloud Computing).
Bienes de consumo básico (10-15%)
- Empresas que venden productos esenciales como alimentos y limpieza.
- ETFs recomendados: XLP (Consumer Staples), VDC (Vanguard Consumer Staples).
Oro y activos refugio (10-15%)
- Históricamente, los inversores recurren al oro en tiempos de incertidumbre.
- ETFs recomendados: GLD (SPDR Gold), GDX (VanEck Gold Miners).
Bonos del Tesoro de EE.UU. (5-10%)
- Protegen contra caídas en el mercado.
- ETFs recomendados: TLT (bonos largos), SHY (bonos cortos).
Estrategia de inversión en tiempos de incertidumbre
1. Mantener la calma y pensar en el largo plazo
Si la historia nos ha enseñado algo, es que el mercado tiende a recuperarse. No tomar decisiones impulsivas es clave.
2. Diversificar para reducir riesgos
La exposición a sectores defensivos y activos refugio permite mantener estabilidad mientras el mercado se ajusta.
3. Mantener liquidez para aprovechar oportunidades
Las caídas del mercado pueden generar descuentos atractivos en empresas de calidad. Tener un 10-15% en efectivo o en ETFs de liquidez (BIL, SGOV) permite aprovechar oportunidades cuando el mercado toque fondo.
4. Proteger la cartera con cobertura
Si la tendencia bajista se mantiene, usar ETFs inversos como SH o SDS puede ser una forma de minimizar pérdidas.
Conclusión: ¿Rebote o crisis prolongada?
La historia no se repite exactamente, pero nos da pistas sobre lo que puede venir. Si la reacción del mercado sigue el mismo patrón que en 2018, podríamos estar cerca de un punto de inflexión y recuperación. Sin embargo, el contexto actual es más desafiante, por lo que una estrategia bien estructurada es fundamental para minimizar riesgos y aprovechar oportunidades.
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